Los escritores fantasmas

También se les conoce como escritores por encargo, escritores sin firma, escritores negros o negros de la literatura.

Se le llama escritor fantasma a un profesional de las letras que se dedica a escribir textos por encargos. Estos textos pueden ser autobiografías, cuentos, artículos, novelas u otro tipo de obras, pero con la característica de que están firmados por el cliente, y no por el verdadero autor de la obra.

Los escritores fantasmas se encargan de escribir textos de otros, o también ayudan a preparar, corregir y hasta editar un libro. En ocasiones sólo sirven como una especie de consejeros literarios y acompañan a otros escritores en el proceso creativo y de producción.

Muchos famosos contratan con frecuencia a escritores fantasmas para que escriban sus autobiografías o sus memorias a cambio de un pago de miles de dólares. Incluso hay libros, como una novela, un libro histórico o un ebook, donde se contratan a varios escritores fantasmas para que completen un solo trabajo y salga a la venta más rápido. Estos trabajos son muy confidenciales y tienen prohibido mencionar los nombres de sus clientes.

Los lectores no se dan cuenta porque los escritores fantasmas son muy versátiles, pueden imitar cualquier estilo de texto. Son como camaleones de la escritura, tienen una enorme capacidad de palabras, y pueden cambiar de estilo con mucha facilidad para amoldarse a su cliente. Pueden escribir un artículo muy formal, continuar con un cuento de humor y luego seguir su jornada con una nota periodística.

Los escritores fantasmas toman su papel muy en serio. Para ellos la calidad es muy importante.

Hay personas que tienen ideas muy buenas, pero al momento de plasmarlas pueden quedarse en blanco, es entonces cuando contrata los servicios de un escritor para que redacte la historia, y al final sólo pone su firma. En ocasiones el escritor fantasma podría recibir el crédito, pero sólo como colaborador. Es muy común que políticos, escritores famosos actores u otro tipo de celebridad coloquen su crédito, cuando en realidad el libro fue hecho por un escritor fantasma.

La vida de un escritor no siempre es sencilla, el camino profesional suele ofrecerle dos caminos: O publican sus propias obras con una remuneración muy baja, o escriben las obras de otros, pero a cambio de un sustento económico que les permita continuar con su labor. Hay escritores que hacen ambas cosas, mientras logran posicionarse con sus obras personales, trabajan como escritores fantasmas para poder pagar sus cuentas. Otros simplemente se sienten más cómodos escribiendo para otras personas.

Encontrado en risasinmas.com

Gracias al internet, ha crecido la contratación de escritores fantasmas para realizar contenidos para sitios de otras personas, como revistas web, páginas o blogs. Incluso hay compañías o sitios de internet que se dedican a contratar escritores fantasmas, y ofrecer este servicio a empresas u organizaciones.

Muchos escritores de todo el mundo buscan una oportunidad, provocando que los precios altos disminuyan. El rango de precios abarca desde un centavo por palabra hasta varios dólares por artículo; sin embargo, los nuevos escritores fantasmas a veces cobran muy poco, como un dólar por artículo.

Cuando a un escritor le fascina escribir, no le importa que su nombre aparezca, siempre y cuando le den la oportunidad de seguir ejerciendo su labor y de crecer como profesional. Saben que entrar en la industria editorial no es sencillo, y mientras lo logran pueden recibir un pago por hacer lo que les gusta.

Lamentablemente, hay ocasiones que son los clientes quienes disfrutan de los halagos por el trabajo o disfrutan de la fama por la publicación.